Fuente: journals.cambridge.org/action/displayJournal?jid=PSM
Un estudio de la Universidad de Otago demostró que estar casado reduce el riesgo de padecer de depresión y ansiedad. Las personas casadas tienen menor riesgo de sufrir trastornos de salud mental y abuso de sustancias que aquellas que están solteras o cuyo matrimonio terminó, mostró hoy un estudio internacional dirigido por la Universidad de Otago, Wellington.
De acuerdo con los resultados de la investigación, efectuada en 15 países, casarse es bueno para la salud ya que reduce el riesgo de padecer depresión y ansiedad, así como de consumir sustancias adictivas como tabaco, alcohol y drogas.
La psicóloga Kate Scott explicó que las personas cuyo matrimonio terminó por separación, divorcio o viudez están significativamente en riesgo mayor de trastornos, mientras los hombres son más propensos a la depresión, las mujeres son vulnerables al abuso de sustancias.
Los matrimonios ayudan a las personas a hacer frente al estrés y
a los sentimientos de soledad, indica el estudio aplicado a 35 mil personas y publicado en la revista británica especializada Psychological Medicine. “Uno de los hallazgos más importantes es que en los últimos años se ha afirmado que el matrimonio es mejor para los hombres que para las mujeres en términos de salud mental, pero este estudio no está de acuerdo, el matrimonio es bueno para hombres y mujeres” , dijo Scott.
El lado negativo es que si el matrimonio termina, ya que puede aumentar el riesgo de problemas de salud mental, precisó la especialista de la Universidad de Otago y autora del estudio.
Estar separado, divorciado o viudo se asocia con un mayor riesgo de trastornos en hombres y mujeres, en particular con la depresión en los primeros y la drogadicción y el alcoholismo en las segundas.
El estudio encontró también que los hombres eran menos propensos a la depresión tras su primer matrimonio que las mujeres, lo cual podría explicarse por el hecho de que éstas suelen hacerse cargo de los cuidados de los hijos pequeños.