
que desde siempre, no estuvieron reservados a los varones que reciben el sacerdocio:
a) el Bautismo válido puede ser administrado por cualquier persona que pronuncie la fórmula bautismal con intención de hacer lo que hace la Iglesia: sea esa persona atea, agnóstica o pertenezca a cualquier confesión cristiana.
b) el Matrimonio para su validez no precisa de ministros sagrados ya que los ministros son el novio y la novia. En la ceremonia religiosa un testigo de la Iglesia recibe su consentimiento matrimonial. Puede ser sacerdote o no.
Sin embargo Francisco se muestra partidario de conceder mayor protagonismo a la mujer en la Iglesia. Esto no es abrir la puerta a que las mujeres sean diácono: “Me parece útil constituir una comisión para que lo aclare». Dijo que es necesario que las mujeres tengan más peso

El Papa Francisco ha pedido en varias ocasiones una presencia más incisiva del genio femenino en la Iglesia. Desea analizar cómo esto puede ser más efectivo.